ENERGIAS SUPERIORES

Llamamos energías superiores, a ciertas energías que existen en un mundo que convive con nosotros, con nuestro mundo físico, tangible. Un mundo "paralelo" que, muchos, no lo ven, no lo oyen y ni siquiera lo sienten. Por esto, para ellos se trata de un mundo inexistente, de una ilusión.
Por otra parte muchas culturas hablan desde hace milenios de "otro mundo".
De este "otro mundo", de este mundo de energías, vamos a comenzar a hablar hoy.
De un mundo donde no será conveniente usar el cuerpo físico.
Un mundo lleno de extrañas conexiones que nos harán percibir que todo y todos estamos de algún modo interconectados.
Por eso desde la antigüedad se enseñaba técnicas que permitían cruzar "el umbral". Un umbral que llevaba a ese otro mundo, que a partir de ahora llamaremos "mundo energético".
Pero volvamos por un momento a este mundo, al de la realidad física. Una realidad que creemos muy concreta, y que es útil considerarla así para las cosas diarias de la vida. Pero que deja de ser útil cuando avanzamos en el conocimiento, pues en realidad estamos rodeados de un mundo de energía que no vemos ni comprendemos.
Pero ¿por qué negamos este otro mundo?.
Pues porque no podemos percibirlo, medirlo, cuantificarlo. Nuestros sentidos no lo detectan, están muy limitados.
Escuchamos una gama de sonidos muy acotada, por ejemplo no escuchamos el sonido de un silbato para perros.
Nuestra percepción de los colores también es parcial: no vemos frecuencias inferiores del infrarrojo, ni superiores del ultravioleta.
De este modo creemos que "percibimos" la realidad, y esto no es cierto. Por esto se acostumbra a comparar a lo que percibimos a través de los sentidos físicos con un mapa, y a la suma de los dos mundos, con el territorio.
Nunca un mapa va a poder reflejar la realidad de un lugar, siempre va a omitir algo. Del mismo modo nosotros omitimos parte de la realidad, omitimos un mundo de energías…
Además de omitir parte de la realidad por lo limitado de nuestros sentidos, también la omitimos por efecto de la cultura que nos "impide" ver otras realidades.
Nuestra cultura occidental, concentrada sobre el pensamiento racional y el cuerpo físico, nos impide salir de estos "territorios". De este modo es como si quedásemos encerrados. Atrapados en nuestro cuerpo y en nuestra mente.
Desde este lugar será difícil percibir este nuevo mundo.
Esta limitación de percepción produce efectos:
1. Al negar el otro mundo, no tenemos acceso a las energías superiores que existen en él, y nos reducidos a utilizar únicamente las fuerzas de nuestro cuerpo físico y de nuestra mente racional.
2. Creemos ser seres independientes de los demás seres. Creemos estar separados de los otros. De este modo quedamos reducidos a ser "uno" y los demás serán "los otros". Aparece el desamparo y la soledad.

¿CUERPO CON ALMA O ALMA CON CUERPO?
Hemos dicho que la cultura nos limita en el modo de ver la realidad, por esto para mucha gente "racional" y/o "científica", el alma no existe, pues no ha sido posible encontrarla.
Otros con mucha más apertura afirman que somos un cuerpo físico con un alma.
La realidad es exactamente lo opuesto:
Somos un alma con un cuerpo físico.
La cultura ha invertido los conceptos: cuerpo con alma, en vez de alma con cuerpo.
Y para poder cruzar el umbral que conduce al otro mundo, lo primero que tenemos que hacer es darnos cuenta de que somos un alma dentro de un cuerpo.

ENCARNACIÓN
Nuestra alma en consecuencia, ha encarnado, ha tomado un cuerpo físico para manifestarse en el mundo físico. Pero no sólo eso, para interactuar en el mundo de energías, también dispone de otro cuerpo: del cuerpo energético. Dos mundos y dos cuerpos.

HEMOS ELEGIDO ESTAR DENTRO DE UN CUERPO FISICO PUES ESTE ES UTIL
Hemos elegido encarnar en un cuerpo físico, pues a través de él podemos acelerar nuestro crecimiento, realizar tareas que de otro modo serían difíciles de realizar a través de nuestro cuerpo energético, e incluso en algunos casos casi imposible, por el dispendio enorme de energías que provocaría.

PRETENDER HACER TODO A TRAVES DEL CUERPO FISICO
Entonces el cuerpo físico es un medio para lograr ciertos fines, el problema es que las personas han llegado a considerarlo un fin en sí mismo, y viven exclusivamente a través del cuerpo físico.
Aún aquellas cosas que deberían hacerse sin el cuerpo físico se pretende realizarlas con él. Es una especie de lastre que llevamos a todos lados.
El ser humano pretende llegar a lejanas galaxias arrastrando tras de sí al cuerpo físico, por tal motivo busca de construir máquinas espaciales que junto con él lleven al cuerpo físico. Los antiguos sabios dejaban su cuerpo físico y se trasladaban a voluntad sin importar el tiempo y la distancia.
Al negar nuestra totalidad, usamos solo una pequeña parte de nuestro potencial. Usamos nuestro cuerpo físico para fines que no responden a su naturaleza, se ve sobreexigido, se deteriora, y su rendimiento por lo tanto cada vez es menor.
Por esto, parte de la sabiduría es descubrir, aprender a determinar, cuándo movernos dentro del cuerpo físico y cuándo afuera.


Autor: Dr. Dino Ricardo Deon.